Al oírle encender la moto me
volvió el miedo al cuerpo y lo cogí bien fuerte por las caderas, cerré los ojos
y sonreí.
Empezamos a ir por toda la
velocidad. Cada vez que el hacia ruidos
con la moto yo chillaba y me cogía más fuerte a él, lo que hacía que él se
partiera de risa. Después de unos 15 minutos paramos.
No miré donde estábamos, solo
baje de la moto y como fui tan deprisa me maree y caí al suelo. El se bajo de
la moto preocupado y me levanto a ver si me había hecho daño. Al ver que
no se empezó a reír. Se estaba riendo en
mi cara y eso me enfadó así que me enfadé. Empecé a andar hacia ningún sitio y él
me cogió la mano y me empujó contra él.
-Venga Mia no te enfades, tengo
una sorpresa para ti.- me puso cara de perrito mojado, no me pude resistir.
-Venga vamos.
Andamos un rato y al final
paramos frente de una heladería:
Me quede súper asombrada, no era el típico chico que va a sitios así.
-Bienvenida a la mejor heladería de todo el país.-dijo con
una sonrisa de oreja a oreja.
Uhh una heladería, ahora me apetece un helado jaja, es broma, aunque la verdad es que se me hizo muuuyyy corto así que ya puedes ir publicando el siguiente...
ResponderEliminarBesos :D
Jajaja ^^ Ya se que ultimamente son cortitos... Lo siento :S
ResponderEliminar